lunes, 15 de junio de 2015

Homenaje de las familias a la Casa Grande de Martiherrero

"Buenos días a todos:
Ante todo deciros que entre todas las familias que nos une a este centro, hemos preparado con mucho cariño este acto-homenaje que os queremos rendir a todos los trabajadores de este centro y que empiezo expresando con las siguientes palabras:

Olé, olé, olé, tres veces olé. Vivan los pueblos y gentes que saben ganarle a este mundo mil bellas sonrisas y construir una vida en justicia y en paz. (Mari Trini)
En esta fiesta de la Casa Grande de Martiherrero en la que conmemoramos también su cincuenta aniversario, como testigo directo desde sus comienzos, estos versos de la cantautora Mari Trini hacen mías las palabras que en este momento surgen en mi mente y que hacen suyas las familias aquí presentes:

- Tres veces olé por aquellas personas que, en su día, iniciaron y apostaron por este proyecto qye a día de hoy se mantiene vivo.
- Tres veces olé también por las religiosas que comenzaron esta gran aventura con gran fe y esperanza.
- Tres veces olé por todos los que han dirigido a los largo de estos 50 años y los que dirigen en la actualidad esta institución superando los problemas, a veces muy difíciles, con los que se encontraron y se encuentran.
- Tres veces olé por todo el equipo técnico - médicos, enfermeras, psicólogos, asistentes sociales, administrativos - que con sus conocimientos ayudaron y ayudan favoreciendo siempre el buen desarrollo y gestión del centro.
- Tres veces olé por todos los monitores y monitoras que con su cariño y vocación de servicio comunicaron y comunican la alegría a los niños y niñas que un día les confiamos.
- Tres veces olé por todos y todas que ofrecieron y ofrecen actividades de teatro, deportes, excursiones culturales, demostrándonos que los niños y niñas aquí residentes nos pueden dar lecciones de amor por la vida.
- Tres veces olé por toda la buena gente que, desde los servicios, hicieron y hacen posible que tengamos comida todos los días, la casa esté tan limpia y acogedora, los jardines tan cuidados, el transporte a punto... y un sinfín de cosas más.
- Tres veces olé por la gente que utilizando las nuevas tecnologías hacen porsible que la finalidad de esta Casa Grande llegue a lugares a veces muy lejanos y se dé a conocer la obra que aquí se realiza.

A todos ¡muchas gracias! ¡Que Dios os bendiga!

Esta placa en homenaje a todos vosotros, trabajadores del Centro de Educación Especial Santa Teresa, hoy la Casa Grande de Martiherrero, porque ¡os lo merecéis!"