lunes, 1 de agosto de 2016

FELIZ DESCANSO ESTIVAL A TODOS



Hace ya ocho meses que comenzó el año 2016 y como siempre sucede, solo hemos tenido que ir tachando días del calendario para quitar las hojas de cada mes y así llegar al día 1 de agosto. ¡ Que fácil parece todo esto si solo se ciñera a ese acto manual!. Lo difícil y complicado ha sido llegar hasta este día por todas las connotaciones que tiene llegar aquí.

El mes de enero comenzó siendo muy duro porque tuvimos  temas difíciles relacionados con la salud y todo esto unido al día a día en lo referente a temas económicos, subidas salariales, gestión por competencias, negociaciones con gerencia de servicios sociales para nuevas reubicaciones de plazas de chicos…. Y también fue duro por en lo posible, querer conciliar la vida laboral y familiar de los profesionales. ¡ A veces perseguimos retos tan imposibles, que nos crean incertidumbre y hasta dolor de cabeza.!

Febrero pasó como siempre, sin pena pero al final con algo de gloria, puesto que alguien quiso y siguió pensando en nosotros: el Club Rotary. Nos conocieron y decidieron llevar a cabo su cena benéfica a favor de la Casa Grande de Martiherrero. ¡Gracias! Fue un espaldarazo para seguir soñando un poquito más y también para creer en la gente buena.

Marzo nos trajo novedades en cuanto a lo que respecta a algunos trabajadores. La vida es tan rara y a veces tan difícil de entender, que tuvimos tiempo para reír por alguna alegría y también para llorar por las penas. Llegaron chicos nuevos, fuimos de boda, nos acompañó mucha gente en la cena benéfica del Club Rotary, hubo caras nuevas de trabajadores en nuestra casa y, desde luego, continuamos acompañando a aquellos que lo estaban pasando mal y que desgraciadamente no eran pocos. La vida parece muy larga pero… ¡que corta es! Eso sí, está llena de sorpresas día a día, es lo que hay y no queda otra.

Y…llegó abril dándonos muy fuerte y muy duro y lo que es peor: sin poder hacer nada. Otra vez más toda la casa de Martiherrero demostró su grandeza de alma arropando a gente muy nuestra que nos necesitaba. Era lo único que podíamos hacer: estar en silencio y a su lado. Lamentablemente en los meses siguientes lo hemos tenido que hacer con más compañeros. Cuando esto sucede, los temas económicos, sociales y de infraestructura e intendencia, pasan a segundo lugar pero…existen y hay que darles salida también. Eso sí, durante este mes tuvimos muchas visitas de personas  con inquietudes sociales, que han sabido de la existencia de esta Casa y han querido conocerla in situ.

Después llegó mayo y continuamos con nuestro día a día, siempre cargado de sorpresas buenas y….hasta malas. Eso sí, siempre preocupados por las negociaciones con la gerencia de servicios sociales para mejorar la calidad de vida de nuestros chicos. Han sido muchos meses de diálogo, hasta conseguir resultados positivos para todos. También en mayo se llevó a cabo el II Certamen de Teatro de la Casa Grande. No tengo palabras para definirlo ni para expresar mi gratitud a todos los que lo hicieron posible. ¡Todo un éxito, pero, cuanto trabajo conlleva, trabajo del que se ve y, fundamentalmente, del que no se ve!

Va pasando el tiempo, los meses, los días y todos, absolutamente todos, vamos notando el cansancio que ocasiona el trabajo y también sentimos la satisfacción de ir haciendo las cosas con mucha coherencia y honestidad, aunque a veces no nos salgan como nos gustarían.

Y así casi dándonos cuenta de todo lo que hemos hecho, nos metemos en junio, nuestro maravilloso mes, el mejor de todos, el que suena a fiesta, el más alegre, el que trae sonrisas y reconocimientos y el que nos hace mejores. Se inicia con el Camino de Santiago por la provincia de  Ávila y este año lo hemos hecho acompañados de otras entidades a las que hemos invitado para que realizaran alguna jornada junto a nosotros: Gotarrendura, Síndrome de Down y Pronisa. El grupo de senderismo de la Casa Grande se merece tanto reconocimiento social, como esfuerzo hacen todas las personas que lo forman. Así nos lo reconoció el Grupo de Montaña Almanzor.

Por otra parte sé que en este mes hubo que tomar alguna decisión que no todos los profesionales “han querido entender”. Lo siento, a veces pensando en el interés general de un colectivo, se dan algunos coletazos a los intereses particulares. Somos muchos y hay que pensar en el bien común de un colectivo, no en las individualidades.

El día 16 se celebró el día de la Casa Grande. Llovió mucho, muchísimo, pero aun así, todo salió bien. Nos acompañaron muchísimas personas de la sociedad abulense ( hasta Alicia García, consejera de familia de la Junta de Castilla y León quiso estar entre nosotros) también del mundo de la empresa de Madrid (NEOBIS) empresas de Ávila ( Elgorriaga, Plástic Omnium) familias, profesionales, amigos etc.. Resultó tan extraordinariamente maravilloso como agotador. Pero es cierto que merece la pena porque recibimos mucha energía a través de tanto reconocimiento social que se da a todos los profesionales y a la propia Institución. ¡Qué bonito luce nuestro teatro y nuestro coro musical ese día. ¡ Cuánto trabajo, cuántos sinsabores, momentos de tirar la toalla y cuántos minutos de volver a coger las riendas para seguir y seguir caminando y mirando hacia adelante!.

Junio es un mes de finalizar historias, proyectos, trabajos y también de recibir muchas visitas como ha ocurrido este año: Bankia Madrid, Víctor Sastre y su Fundación quien a través de su “soy bici, soy deporte” nos impresionó y deleitó tanto como nosotros a él. Estas variadas visitas, nos han hecho vivir muy buenos momentos.

En junio se han hecho tantas cosas, que hasta hicimos nuestra propia fiesta familiar para chicos y profesionales en nuestros jardines. Resultó muy entrañable y emotivo, así que lo seguiremos haciendo en los próximos años.

Acabamos junio todos muy cansados y empezamos a echar de menos días de asueto y de descanso pero se sacan fuerzas no sé de dónde y así se inician las jornadas culturales con la llegada del mes de julio, nuestro mes cultural, creado hace muchísimos años y que cada vez está más profesionalizado y con grandes expectativas. Nadie que conozca la Casa Grande, puede negarle el carácter educativo que ha tenido y que va innato a ella y con ella. Julio es un mes de aprendizaje a través del divertimento. Se une el ocio y la cultura, no son actividades extraescolares, ni tampoco veraniegas, simple y llanamente son cosas del día a día de esta Casa, es más de todo lo que hacemos, lo único es que se llevan a cabo muchas de ellas en nuestro maravillosos entorno físico. ¡Que entorno más privilegiado tenemos  y cuánto disfrutamos de él en este tiempo! Eso sí, el día 17 de julio se celebró en San Bartolomé de Pinares la marcha de senderismo amigos de la casa grande de Martiherrero y allí fueron nuestros chicos, familiares de ellos y junto con los habitantes de ese gran pueblo pasaron un día extraordinariamente bueno. ¡ Gracias a San Bartolomé de Pinares por organizar este evento y por su generosa hospitalidad!

Como se puede observar es por todo lo escrito y descrito hasta este punto por lo que todos los profesionales de esta Casa, tienen que descansar y disfrutar de su entorno y de su vida. Todas las personas que trabajan tienen derecho al descanso según el Estatuto de los Trabajadores, pero yo les aseguro que si no fuera así, a todos los que forman la Casa Grande de Martiherrero habría que dárselo por derecho propio ganado día a día a base de profesionalidad,, entrega, dedicación y cariño a todos los chicos y chicas que viven en este hermoso lugar.

Divertios, quereos un poco y mimaos mucho porque os lo merecéis. Dentro de un mes nos reencontraremos todos y nos volveremos a reinventar con mucha energía, para hacer la vida mejor a estas personas que tanto queremos y que nos necesitan.  FELICES VACACIONES, GRACIAS. UN ABRAZO.