Desde hace varios años la
Casa Grande de Martiherrero apostó por una actividad que conlleva muchas cosas
positivas: CAMINAR. Con esta acción conseguimos aunar el esfuerzo (en su
significado más amplio) y gozar de mejor salud. ¡Hace ya tantos años que esta
Casa realizó el primer Camino de Santiago!
Como actividad de ocio se
empezaron a realizar marchas a lugares muy diversos y se comprobó la buena
resistencia física de muchos chicos y, sobre todo, se observó lo bien que lo
pasaban en estas salidas y lo reconfortados que volvían después de conseguir
retos. Es cierto que lo que comenzó como divertimento se ha convertido en algo
muy mimado, cuidado y con una estructura organizativa que muchas personas
querrían para ellas y su entorno. Fue todo un logro constituir el Club de
Senderismo de la Casa Grande de Martiherrero. Se creó con esperanza, ilusión,
grandes expectativas y mucho entusiasmo. ¡Significaba tanto para nuestros
andarines!.
Poco a poco nuestros chicos
se han ido afianzando en su estilo de caminar, con sus fuerzas y con sus
capacidades para alcanzar grandes cimas.
Y así…pasito a pasito,
zancada a zancada, sin entrenamientos equivocados, sin obsesionarse con el pie
trasero, ni con el cuello recto y siempre con los brazos al ritmo que se
necesita, nuestros chicos han finalizado la Ruta Teresiana de la Salud siendo
recibidos por nuestro querido Obispo de Ávila, D. Jesús García Burillo a las
puertas de la Iglesia de la Santa en Ávila. ¡Nadie mejor que él podía estar
esperándoles porque para ellos es parte de su familia! Desde aquí mi gratitud
para Jorge Zazo por dejar su actividad y venir a recibir a este grupo
alentándoles con sus palabras tan llenas de cariño. Ha sido todo un éxito tanto
en organización como por los resultados obtenidos. La Casa Grande ha puesto
mucho empeño y además hemos contado con la ayuda de la Diputación de Ávila (siempre
tan generosa con esta Institución cuando la necesitamos) y de nuestra querida
Cruz Roja de Ávila (nunca podremos agradecerles su protección y cuidados).Todo
esto demuestra que cuando se hacen las cosas con esfuerzo y bien, entonces se
tiene el poder de seguir haciendo grandes acciones.
La Casa Grande apostó por
esta actividad porque así conseguía un doble objetivo: uno, favorecer la inclusión
social y dos, se facilitan las relaciones interpersonales. El hecho de que en
esta ruta nos acompañen cada día en la aventura de caminar, chicos de otras
entidades como han sido ASESCA de Barco de Ávila, Villa Santa Teresa de
Gotarrendura, Síndrome de Down Ávila o Pronisa de Ávila que nos ha acompañado
en actividades de ocio, ha facilitado que interactúen entre ellos, se
comuniquen y se conozcan un poco más. Gracias a estas entidades por creer en
nuestro proyecto y querer participar en él. Hay que decir que en esta acción no
hay reconocimiento a los tres primeros o mejores participantes. Todos son
buenos y ganan al tiempo que crece su autoestima. Han conseguido superar los
retos a los que se han enfrentado.
Ahora bien, todo esto no
habría visto la luz ni se habría podido llevar a cabo si no estuvieran
dispuestos y disponibles un gran número de profesionales de la Casa Grande que
siempre, siempre están ahí para de manera absolutamente voluntaria ser la luz
que guie a estas personas a la vez que con sus capacidades complementan la
discapacidad de sus chicos (porque son sus chicos, aquellos con los que están
día a día). Hay personas que tienen una manera diferente de entender la vida,
son aquellos que ofrecen su tiempo y su entusiasmo para que otros vivan mejor.
Siempre encuentran una causa con la que identificarse. Estas personas tienen
por objetivo transformar la sociedad convencidos de que su esfuerzo contribuye
a ofrecer un mundo mejor a otros que lo necesitan.
La Casa Grande tiene un gran
número de trabajadores pero es cierto que hay un alto porcentaje que desarrolla
su labor de manera muy profesional y además comparten en su ADN la generosidad,
solidaridad, empatía y la integridad. A todos los que lleváis a cabo estos
proyectos…GRACIAS
Por último gracias a Sonia
Abad por desarrollar este proyecto. Aunque ella diga que una buena coordinación
sin un gran equipo es un fracaso… yo la respondo que tiene que haber un motor y
ese motor se llama Sonia Abad que ha puesto todas sus capacidades para que este
proyecto saliera bien con la ayuda del equipo de profesionales. ¡Lo habéis
conseguido!
Ayer cansados pero muy
orgullosos os escuché decir:
“gran trabajo grupal con
compañerismo”, “un trabajo excepcional”, “un gran equipo y un 10 para los
chicos”, “experiencia gratificante”, “Todo por los chicos”, “Los chicos estaban
muy contentos que al final es lo que gratifica”, “Estar unidos y coordinados es
una ventaja pero es más importante hacerlo con los chicos y alcanzar las metas
con alegría”, “ Lo mejor de todo: nuestros chicos han conseguido un nuevo
reto”, “ La unión es un valor de esta Casa y los chicos son capaces de todo .Lo
han logrado”
Yo necesito deciros: Gracias
de corazón por lo que hacéis y por como sois. Acciones como esta hace más
grande a esta Casa y, sobre todo y lo más importante, hace que la sociedad
respete a estos chicos dándoles fuerza y credibilidad sobre lo que son capaces
de hacer. ¡Habéis conseguido que den otro paso de gigante!